En un mundo donde todo es exprés, las relaciones, las citas, los negocios, el sexo, algunas veces a lo que menos le damos importancia es a ser uno mismo y disfrutar el tiempo a solas.
En Cómo ser soltera (How to be single) cuatro mujeres nos muestran cómo sobrevivir a una de las etapas más “aterradoras” pero al mismo tiempo, divertidas de la vida, la soltería. Y es que, justo acaba de pasar San Valentín y debo confesar que cada año es más lastimoso leer los estatus de todas las distintas redes sociales, lxs solterxs se dan golpes por estar solteros, porque “nadie los quiere” y porque “al fin y al cabo a nadie le importan”, bah.
Todo esto nos lleva a que, la guionista y productora de Cómo ser soltera, Dana Fox nos ofrezca una perspectiva actual y fresca de la vida de algunas mujeres que viven en Nueva York y que lo único que buscan es un lugar dentro de su propia vida para ser ellas mismas. “Las comedias románticas siempre se centran en el romance, pero esta es una comedia sobre lo que pasa en el tiempo entre relaciones…” dice la productora. Y es cierto, Cómo ser soltera es una entretenida película que nos narra distintas situaciones que, a simple vista parecen irreales, pero que, cuando las comparamos con la vida real no están tan lejos del mundo en el que vivimos.
Esperábamos mucha comedia y sinceramente no tiene tanto como parece, es más, creo que los mejores chistes los quemaron ya en los trailers, sin embargo, la química de Rebel Wilson y Dakota Johnson nos llevan por la historia de manera divertida, Dakota es la típica niña romántica enamorada de su único novio de toda la vida y Rebel la desenfrenada mujer que busca sexo casual en cada salida. Y, ninguna tiene que ser como la otra para encajar, sólo van tomando decisiones que las llevan a conectarse con ellas mismas, pero de una manera más profunda y natural.
Cómo ser soltera es una dominguera película, divertida, con una perspectiva fresca y actual, no vas a reír tanto como prometían los avances, pero seguro tiene algo que te inspira para disfrutar tu momento de soltería, y que probablemente podría hacer que el próximo San Valentín haya menos estatus dolorosos en redes sociales.