En tiempos de guerra, una mujer alza la voz para buscar justicia y dar esperanza a los inocentes.
Encarnada por Zeus, Diana (Gal Gadot) ha sido entrenada desde niña en la paradisiaca isla de Themyscira junto a un grupo de Amazonas con la misión de defender a la humanidad del regreso de Ares, Dios de la guerra. Diana en la isla, guarda ilusiones de tener este enfrentamiento y espera con ansias cumplir con la misión de salvar al mundo.
La esperanza de Diana ve la luz cuando un grupo de soldados alemanes llega a la costa de las Amazonas en la persecución de un espía inglés (Chris Pine), quien las pone al tanto de la guerra europea que ha cobrado millones de vidas inocentes, lo que despierta el sentimiento de lucha de Diana y la hace llegar hasta el punto de guerra para terminar con Ares, el que cree, es el culpable de todo.
Si juzgamos por la factura y producción de la película, nos quedamos con una excelente entrega en cuestiones visuales, escenas de acción memorables y una fotografía que hace justicia al nombre de la película; en general, la cinta empodera y apasiona. Intencionalmente, se presenta a una diana alejada de la sofisticación que tendrá en La Liga de la Justicia.
La cinta es contada de una manera tan fluida y dinámica que no cansan las 2 horas 20 minutos que dura el filme. Su narrativa es simple y no se arriesga a proponer algo nuevo en el género, pero el ritmo tiene tanta acción con la princesa Amazona arrasando con los villanos, que es un gran espectáculo visual, que si bien, abusa un poco de slow motion, no se reclama.
Pero más allá de los efectos especiales, Mujer Maravilla es el reflejo de la visión de su directora Patty Jenkins por alzar la voz y decir, ¡Existimos, y somos igual de poderosas que los hombres! Gal Gadot tiene todo el peso de la cinta, su co-protagonista no llega ni al 30% de relevancia dentro de la cinta y en cada escena de acción, hay una mujer que inspira y soporta la secuencia.
Mujer Maravilla no falla, si bien es muy básica y la parte de historia más interesante se encuentra en la primera parte de la cinta, el resto es un deleite para el espectador que transmite mensaje mucho más implícitos que directos. Sin dar spoilers, me atrevo a decir que Mujer Maravilla también es la visión más pura de la justicia y que deja un mensaje de amor y fe como ninguna otra cinta de superhéroes lo había hecho.
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