Ciudades de Papel es una metáfora de la vida y del amor, de los espejos que usamos para amar aferrándonos a la esperanza y la fe.
Esta película, basada en el best seller de John Green (The fault in our stars), nos ofrece una historia que personalmente no encajaría en el amor adolescente, porque ofrece mucho más que eso. Paper Towns es el misterio que identifica a Margo (Cara Delevingne) y Quentin (Nat Wolf) como dos jóvenes con personalidades distintas, con sueños distintos y planes de vida distintos. La forma en que Q ve a Margo es la del amor platónico. Margo es la chica cool de la secundaria, la que todos querrían porque aparentemente es perfecta, pero que al mismo tiempo es misteriosa y reservada. ¿Y quién mejor que Cara Delevingne para este papel? Cara es eso, misterio y proyección al mismo tiempo. Es cierto que la musa de Karl Lagerfeld no es la mejor actriz, pero sí es quien tiene esa esencia de rebeldía y dulzura, la chica por la que recorrerías kilómetros sólo para volver a verla, y esta vulnerabilidad emocional combinada con salvajismo hace que Q, junto a sus amigos vivan una aventura que le da otro significado a su amistad.
La dirección de Jake Schreirer nos ofrece una película relajada y digerible, pero con mensajes en cada escena acerca de la amistad, la aceptación y la fe el amor. Todos los personajes tienen identidades comunes, te puedes identificar con cualquiera, es cercana a la realidad y eso crea un match con los espectadores.
Ciudades de Papel es inspiradora, reflexiva y a la vez tan común que seguro te recordará algunas escenas de tu propia vida.
Veredicto 9/10