Lejos de la expectativa, Venom se pierde en su propia historia.
Cuando parecía que las cintas de antihéroes tomaba fuerza, humanizando y dándonos una perspectiva diferente de lo que realmente es un héroe, Venom llega con una propuesta conformista y desatinada que no logra encariñarse con su misma trama.
Tomando como eje central la investigación espacial de Fundación Vida, cuyo fin es encontrar un nuevo mundo de residencia para la humanidad, Carlton Drake (Riz Ahmed) está dispuesto a experimentar la simbiosis entre humanos y nuevos seres recuperados de una misión fallida. A la par, Eddie Brock (Tom Hardy), vive uno de sus peores episodios de vida, al ser despedido de su empleo como reportero tras cuestionar en una entrevista la ética de Carlton. Sin embargo, Eddie quiere continuar su investigación y decide entrar al laboratorio, donde logrará ponerse en contacto con estas especies extraterrestres y Venom cobra vida.
Un personaje increíble
El sentido de la palabra increíble cambia totalmente de la perspectiva que uno tendría del personaje, ya que la relación Eddie-Venom se vuelve eso, un relato que ni ellos mismos se creen en ningún punto de la película. La secuencia donde Eddie descubre sus nuevas habilidades sucede tan rápido y poco verosímil que no puede convencer al mismo actor de lo que está tratando de interpretar.
El primer acto de la cinta es demasiado lento y repetitivo, escenas una tras otra que dicen las mismas cosas, como queriendo forzar a hacernos creer lo que está pasando, nuevamente, increíble.
Dos en uno
Cuando por fin la cinta logra arrancar y los personajes tienen una “buena relación” dos en uno, pareciera que al estudio le dio miedo ir más allá y aventurarse a hacer una historia oscura, como se pintaba en el tráiler. Entonces la cinta comienza a desmoronarse entre escenas tímidas, simplonas y con humor forzado.
Hay que decir que, aún con esa incredulidad de Hardy hacia su papel, es lo mejor que tiene la cinta. El resto del cast pasa de largo por toda la cinta, personajes sin carisma y villanos que nunca logran ser odiadios.
Aunque Venom logra entretener y ofrece un par de efectos especiales dignos, se queda demasiado plana y perdida en el universo de los superhérores.